Los proyectos de los emprendedores y pymes participantes en la aceleradora industrial POLO positivo tendrán como sede el Centro de Dinamismo Empresarial del edificio Nexo de Fundación Caja de Burgos. Así lo ha anunciado el director general de la organización, Rafael Barbero, durante el acto de presentación de las nuevas convocatorias para el año 2021 de la aceleradora.
26 de mayo de 2021
Néstor Lacarra (Gonvarri), Nacho Fernández Baragaño (Aciturri), Rafel Barbero (Fundación Caja de Burgos), Javier Villacampa (Grupo Antolín) y Gabriel Torres Pascual (Calidad Pascual) .
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A partir de esta nueva convocatoria, los creadores de proyectos industriales que a nivel nacional quieran desarrollar sus ideas en Burgos contarán con el espacio coworking y los emprendedores en fase de aceleración dispondrán, a su vez, de módulos individuales en los que ubicar temporalmente su proyecto empresarial. Nexo también acogerá las reuniones programadas con los mentores y consultores especializados.
Durante el primer encuentro con los medios de comunicación tras la pandemia por Covid, responsables de todos los socios promotores de POLO positivo: Aciturri, Grupo Antolín, Pascual, Gonvarri y Fundación Caja de Burgos, desgranaron las novedades y trayectoria de la primera aceleradora en España especializada en la creación y crecimiento de proyectos industriales.
Rafael Barbero aseguró que POLO positivo representa la capacidad de cinco organizaciones burgalesas, cada una referente en sus respectivos sectores, dispuestas a apostar por la capacidad de la industria de Burgos.
Asimismo, el responsable de la fundación bancaria especificó que la tecnología y la sostenibilidad serán los dos vectores de crecimiento industrial por los que apostará, preferentemente, la aceleradora.
Por su parte, el director de Comunicación de la aeronáutica Aciturri, Nacho Fernández Baragaño, subrayó la solidez de los aspectos comunes que unen a las cinco organizaciones: «Todos tenemos apego a nuestro territorio (la provincia de Burgos), y a pesar de ser compañías internacionalizadas mantenemos nuestros centros de innovación en la provincia de Burgos. Compartimos los mismos valores en torno al emprendimiento y la innovación como parte de nuestra Responsabilidad Social Corporativa».
Para Fernández Baragaño el valor añadido de Polo positivo con respecto a otras aceleradoras es la transmisión de conocimiento. “Esa es la mayor valía que podemos ofrecer a todo emprendedor que se proponga arrancar su proyecto industrial en la provincia de Burgos», dijo.
Fue el director corporativo de Innovación de Grupo Antolin, Javier Villacampa, el que arrojó datos relevantes sobre la industria burgalesa. “El peso específico del sector industrial manufacturero es indiscutible en Burgos, con más de un 24% del PIB provincial, superior a la media regional y nacional”, subrayó.
Villacampa señaló a la industria como la actividad necesaria para tener un balance económico en España “al igual que ocurre en Alemania o Francia”.
“Por ello, nuestro apoyo a POLO positivo es clave apoyar el #emprendimiento industrial en una región privilegiada como #Burgos” cuyo fin último es la promoción de una nueva generación de emprendedores industriales “que puedan tomar el testigo, liderar y seguir manteniendo al sector burgalés como referente innovador en el ámbito de la industria”, manifestó.
Por su parte, Gabriel Torres Pascual, director de Innovación de Calidad Pascual, fue el encargado de hacer balance de la actividad durante el primer año de POLO positivo.
En la primera edición, cuatro proyectos BeMetrics, BCNDT, Metrix y Embutidos Artesanos Rioseras formaron parte del programa IMÁN de ideas, cuya finalidad es favorecer el nacimiento de proyectos empresariales de ámbito industrial, tecnológico o de servicios de apoyo a la industria. “Se presentaron un total de 45 emprendedores, de los cuales 27 se desestimaron, 10 renunciaron y 4 se encuentran en estos momentos en evaluación”, detalló.
El experto en innovación terminó su intervención animando a todas aquellas personas con ideas innovadoras y escalables en el ámbito industrial a presentarse a la nueva convocatoria, hasta el 31 de diciembre, en el siguiente enlace .
Cerró la rueda de prensa el director general de estrategia de Gonvarri, Néstor Lacarra, con una de las frases más memorables de la jornada: «Es el momento adecuado ( en alusión a la actual etapa de recuperación poscovid) y el lugar adecuado (Burgos) para apostar por el crecimiento de nuevos proyectos industriales a través de POLO positivo”- y continuó- “los promotores venimos de empresas familiares que hemos sabido crecer, internacionalizarnos y adaptarnos con agilidad a nuevos retos, por ello tenemos la experiencia y el equipo para apoyarlos».
Lacarra presentó el segundo programa de POLO positivo: Impulso Pymes, una línea dirigida a empresas con más de tres años de antigüedad del sector industrial, tecnológico o de apoyo a la industria, que han alcanzado, en algún momento de su trayectoria, el punto de equilibrio financiero. Las pymes solicitantes deben tener una media de entre 30 a los 80 trabajadores, con una cifra de negocio o de balance menor de 10 millones de euros y con una línea-proyecto de crecimiento identificada para aumentar la rentabilidad, crecer, generar empleo o internacionalizarse.
“Desde POLO positivo se les facilita la definición del plan de crecimiento, la financiación de los planes de acción derivados, préstamos participativos de Fundación Caja de Burgos (hasta 100.000 euros) y la búsqueda de otras alternativas complementarias o la capacitación de los puestos clave con un programa de formación de directivos”, concluyó el director de Estrategia de Gonvarri.